26 de agosto de 2007

Cómo superar el síndrome de estrés postvacacional

Llega el fin de las vacaciones y con él la vuelta al trabajo o a los estudios. Un cambio que puede resultar muy duro a algunas personas pero en ningún caso puede equipararse a un trastorno de depresión psicológica. No obstante, es conveniente tener en cuenta algunos consejos que pueden facilitarnos esta vuelta a la normalidad.

En primer lugar, hay que intentar minimizar la brusquedad en los cambios en las rutinas y horarios. Es decir, no tener amplias variaciones en los horarios de sueño, horarios de comidas, ejercicio físico, tipo de dieta y, en definitiva, en todo aquello que hacemos diariamente y que condiciona el funcionamiento de nuestro organismo.

En segundo lugar, la vuelta a la actividad ordinaria será más dura cuanto mayor sea nuestra insatisfacción con la rutina habitual del resto del año. Este es el componente psicológico más difícil de controlar, especialmente porque tendemos a utilizar el tiempo de vacaciones como un momento de evasión total, aparcando nuestros problemas en lugar de solucionarlos. Cuando llega el momento de retornar, descubrimos que los problemas siguen ahí y no podemos evitar sentirnos mal al comparar el momento de evasión con la dura realidad cotidiana.

Debemos ver este momento de decaimiento temporal como una oportunidad ideal para replantearnos nuestros principales objetivos en la vida. A menudo, no son los problemas aparcados temporalmente lo que nos atormenta sino la falta de problemas o de cualquier objetivo, que nos hace sentirnos inútiles. Es necesario que reflexionemos y nos fijemos unas metas a largo plazo. Estas metas pueden ser finalizar unos estudios, aprender un idioma, alcanzar nuestro peso deseado, obtener una promoción en el trabajo… Además de fijar el objetivo a largo plazo, para no caer en la frustración, debemos fijar unas metas intermedias que nos ayuden a alcanzar el objetivo.

Por ejemplo, si nos proponemos aprender inglés tendremos que empezar por buscar academias, comparar precios y encontrar un hueco en la agenda para poder asistir a las clases. El objetivo a largo plazo podría ser conseguir el first certificate, y los objetivos intermedios matricularnos en una academia en un plazo de 15 días, asistir a clases 3 días a la semana y ver una película a la semana en versión original.

El mero hecho de iniciar estas acciones hará que nos sintamos mejor y que afrontemos nuestra vida con la motivación necesaria para superar las dificultades. Las metas deben ser realizables y los plazos lo suficientemente ambiciosos para ponernos las pilas pero sin llegar al extremo de percibirlos como algo irrealizable.

6 de junio de 2007

SISTEMAS NEURALES DE REFORZAMIENTO EN LA ADICCIÓN A DROGAS:


Según un artículo del autor Barry J. Everitt publicado en la revista Nature neuroscience es bien conocida la función del núcleo accumbens en los efectos reforzantes de las drogas, pero no lo es tanto el rol desempeñado por el estriado. El mecanismo de aprendizaje asociativo resultante de la interacción entre el condicionamiento clásico y operante está mediado por el sistema dopaminérgico del circuito corticoestriado.

El núcleo accumbens es necesario para los efectos estimulantes directos psicomotores de la cocaina. La cocaina tiene efectos reforzantes que dependen directamente de otra región del estriado ventral, el tubérculo olfatorio. Uno de los mecanismos más conocidos es la vía núcleo accumbens con proyecciones ascendentes dopaminérgicas a otras zonas del estriado dorsal. También depende de la interacción en el estriado dorsomedial con aferencias de regiones específicas del cortex medial prefrontal.

Se han identificado marcadores celulares en consumidores crónicos de cocaína como son los receptores dopaminérgicos D2 del estriado. Por otro lado, lesiones selectivas de la amígdala basolateral o el núcleo accumbens pueden alterar la dependencia de cocaína o heroína. Los efectos de lesiones en la amígdala basolateral o núcleo accumbens reflejan la interacción de estas estructuras en el reforzamiento condicionado y se asocia con una gran impulsividad.

Lesiones selectivas en el cortex orbitofrontal también pueden alterar la adquisición del proceso de refuerzo condicionado en la dependencia de cocaína. La corteza orbitofrontal está fuertemente interconectada con las proyecciones del núcleo accumbens y el estriado dorsal anterior.

Además, el hipocampo con aferencias glutamatérgicas al núcleo accumbens también ha recibido atención en el estudio de la dependencia a diferentes drogas.

Finalmente la inactivación de la parte dorsomedial del cortex prefrontal previene la reinstauración de la respuesta elicitada por estímulos relacionados con las drogas. Esto es consistente con los estudios que sugieren que las personas con abuso crónico de drogas muestran déficits en procesos de control inhibitorio y toma de decisiones.

9 de abril de 2007

Adicción a internet

Según el autor Young, debemos empezar a sospechar que podemos estar generando una dependencia de internet si notamos los siguientes síntomas:

1. Tolerancia:

a. Necesidad de invertir una cantidad mayor de tiempo en la red para alcanzar el mismo grado de satisfacción.
b. Satisfacción cada vez menor con el uso continuo de la misma cantidad de tiempo en Internet.

2. Síndrome de abstinencia. Dos o más de los siguientes síntomas:

a. Agitación psicomotriz.
b. Ansiedad.
c. Pensamientos obsesivos sobre lo que está pasando en Internet.
d. Fantasías o sueños en relación con la red.
e. Movimientos de los dedos voluntarios o involuntarios relacionados con el tecleado. Uso de Internet para aliviar los síntomas.

3. El acceso es más frecuente o durante períodos más prolongados de lo que se tenía planeado.

4. Deseo persistente o esfuerzos infructuosos de poner fin o limitar el uso de Internet.

5. Inversión de mucho tiempo en actividades relacionadas con el uso de Internet: comprar libros, hacer nuevos ensayos en la red o con las páginas Web, etc.

6. Abandono o reducción de actividades profesionales lúdicas o sociales por culpa de Internet.

7. Persistencia en el uso de Internet a pesar de los problemas físicos, sociales, profesionales o psicológicos que son causados o agravados por el uso de Internet: privación de sueño, problemas de pareja, tardanza por la mañana,abandono de las obligaciones o pérdida de interés por los demás.

22 de marzo de 2007

Insomnio

Según un artículo del autor Mariano Choliz(1994), entre las explicaciones teóricas acerca de la génesis y mantenimiento del sueño, el exceso de activación (somática, cognitiva o emocional) ha sido una de las más significativas, al mismo tiempo que una de las que ha generado un número más considerable de formas de intervención comportamental. La más clásica de ellas es la hipótesis de la activación somática, que asume que los insomnes manifiestan una actividad fisiológica y motora excesiva que antagoniza con la conciliación del sueño.
No obstante, no existe mucha evidencia experimental que avale el hecho de que el insomnio sea debido exclusivamente a un exceso de activación fisiológica, sino que se ha demostrado que tanto la activación cognitiva como la emocional también ejercen un papel de extraordinaria relevancia en la génesis y mantenimiento de las dificultades del sueño. Así, una actividad mental excesiva al tiempo de dormir, preocupaciones, pensamientos intrusivos, ansiedad o depresión pueden precipitar y mantener los trastornos del sueño.

21 de marzo de 2007

¿Cómo se convierte un individuo
en jugador patológico?

La primera explicación podría ser la ganancia monetaria, sin embargo si analizamos la cuestión de forma más detallada:
Una de las posibles razones es que se va generando en el jugador una percepción de falso control, ya que cree que las razones por las que puede ganar es porque posee habilidades suficientes y de destreza con las que le es posible vencer al azar.
Además el contacto con el juego lleva a una tendencia a asumir un riesgo monetario cada vez mayor. El proceso por el que un jugador se convierte en patológico es progresivo: primero normalmente pasa por un fase de ganancias, atribuidas a habilidades propias, a la que le sigue una fase de pérdidas, que atribuye a factores externos. Después volverá a jugar para recuperar el dinero perdido, lo que le llevará a pedir prestado, conseguir dinero vendiendo sus bienes, hipotecándose…Finalmente entra en una fase de desesperación. En un último esfuerzo, pedirá prestado a alguien cercano a su entorno una suma importante de dinero y lo perderá todo. En este momento es cuando la persona suele acudir a consulta.

20 de marzo de 2007

Irritabilidad crónica

Muchos de los pacientes que acuden a terapia son proclives a experimentar sentimientos de irritabilidad o ira. Según un artículo reciente este sentimiento de ira puede ir ligado a situaciones específicas como ser criticado, que se cuestione su autoridad, que otros lleguen tarde o ser obstaculizado en el tráfico.
Sin embargo hay personas que parecen mostrar irritabilidad de forma permanente. Esto puede afectar a las relaciones interpersonales provocando aislamiento o un profundo deterioro. La irritabilidad puede ser un síntoma de ansiedad o depresión, pero en algunos casos la irritabilidad es un síntoma que merece ser tratado de forma nuclear.
Los individuos con irritabilidad crónica poseen unos patrones de pensamiento en los que las características fundamentales son: pensamientos asociados al perfeccionismo personal, necesidad de aprobación social, de las consecuencias catastróficas de que las cosas no salgan como ellos desean, encontrar quién actuó mal y culpabilizar y castigar la fuente. Además existe a menudo una cualidad de “lector de mentes”, por medio del cual el individuo “sabe” lo que están pensando los demás.
Este patrón psicológico podría caracterizar al personaje de la serie “House”, además de otras variables de personalidad obsesiva, como miedo a los pequeños cambios en el entorno… ¿Os parece que podría ser así?